¿Cuándo es conveniente cambiar los neumáticos?
Lo ideal es revisar los neumáticos al menos una vez al mes. Durante esta revisión, asegúrate de comprobar:
- La presión de los neumáticos: mantenerla en los niveles correctos es esencial para un rendimiento seguro y eficiente.
- La profundidad del dibujo: si el relieve de la rueda es de 1,6 mm o inferior, ya no es seguro conducir y es necesario reemplazar los neumáticos.
- Deformaciones o imperfecciones en los flancos: pequeños daños pueden afectar gravemente la seguridad.
Recuerda que las llantas desgastadas son uno de nuestros mayores enemigos, especialmente en asfalto mojado, donde el riesgo de aquaplaning aumenta considerablemente.
Factores que aceleran el desgaste de los neumáticos
Aunque todos los neumáticos se desgastan con el tiempo, existen factores que aceleran este proceso:
- Condiciones climáticas extremas: tanto el frío como el calor afectan negativamente a los materiales de los neumáticos. Además, en zonas como la Costa del Sol, el salitre puede contribuir al desgaste acelerado.
- Malos hábitos de conducción: frenazos bruscos, aceleraciones rápidas o maniobras agresivas desgastan los neumáticos más rápido, especialmente los flancos.
- Impactos contra bordillos o badenes: los golpes al aparcar o subir en escalones son pequeños toques que, con el tiempo, deforman los neumáticos sin que nos demos cuenta.
- Neumáticos mal alineados o incorrectos: si los neumáticos no están alineados correctamente o no son los adecuados para tu coche, el desgaste se produce de manera desigual y prematura.
Aunque el tipo de conducción influye en el desgaste de los neumáticos, el paso del tiempo y las condiciones del entorno son factores igualmente importantes. Revisar y cambiar los neumáticos a tiempo es una parte crucial de tu mantenimiento preventivo, y asegura la seguridad de tu vehículo en la carretera.
No pongas en riesgo tu seguridad y solicítanos una revisión de tus neumáticos.